Todo inició con la adopción de Lulú, perrita callejera con problema de piel crónico, por lo cuál no había sido adoptada durante meses.
Muchos doctores la examinaron, pero ninguno logró diagnosticar la causa de su problema, por lo cuál se continuó el único tratamiento que se creía útil, baño semanal y tratamiento hormonal del hipotiroidismo.
Durante un año tuvimos la dicha de tener a Lulú en nuestra familia, la perrita más entendida y mejor portada que hemos conocido.
Al año de haberla adoptado, Lulú murió tranquilamente en su cama mientras dormía.
Gracias a ella hemos desarrollado un gran amor por todos los perritos callejeros que necesitan ayuda, es por ello que necesitamos de ustedes para continuar con este gran proyecto, y brindar alegría a todos aquellos perros que lo necesiten desesperadamente.
Muchos doctores la examinaron, pero ninguno logró diagnosticar la causa de su problema, por lo cuál se continuó el único tratamiento que se creía útil, baño semanal y tratamiento hormonal del hipotiroidismo.
Durante un año tuvimos la dicha de tener a Lulú en nuestra familia, la perrita más entendida y mejor portada que hemos conocido.
Al año de haberla adoptado, Lulú murió tranquilamente en su cama mientras dormía.
Gracias a ella hemos desarrollado un gran amor por todos los perritos callejeros que necesitan ayuda, es por ello que necesitamos de ustedes para continuar con este gran proyecto, y brindar alegría a todos aquellos perros que lo necesiten desesperadamente.